Origen de estas ideas, si me podéis echar una mano

Hola,
Soy filólogo y acudo aquí para rastrear los conceptos y autores dentro del campo de la antropología, biología, psicología, etc. que pudieran servir de base intelectual a algunos puntos que a continuación os presento. Me gustaría saber la procedencia académica (más o menos) de estas afirmaciones.
Espero que sea de vuestro interés y gracias por su tiempo.

1. El ser humano se distingue del resto de los seres vivos por su capacidad de sufrir. Puesto que los seres humanos son conscientes de su propia existencia, su sufrimiento es aun mayor que el de los demás animales. Todo ser vivo busca satisfacer las necesidades que padece (alimentarse, procrear, cobijo, no sentir dolor...). Las personas, que padecen las necesidades comunes a todo mamífero, también buscan escaparse de la angustia de saberse destinadas a morir. Este atributo de ser consciente de su propia existencia, y saber que ésta es finita, da lugar una necesidad que es singularmente humana: el solaz existencial. Pero la capacidad cognitiva que da lugar a este sufrimiento exclusivamente humano, también es la llave para el alivio: a través del razonamiento el ser humano busca explicaciones que sirven para entender el mundo en el que vive y su propia existencia. Puede decirse que la magia, un dios o creador del mundo, son el resultado de la aplicación de un principio de causa y efecto cuyo fin es establecer un relato o explicación que dé fundamento lógico a la vida. Es la coherencia lógica de la explicación lo que da confort, por muy empíricamente falsa que ésta sea.

2. La cultura humana en todo sus aspectos, incluyendo la religión, es un mecanismo de respuesta ante las necesidades humanas. La cultura procura asegurar la supervivencia del grupo al satisfacer toda la índole de necesidades humanas, desde las materiales hasta la existencial. Como una gran carpa, la cultura protege la vida humana del ciego embiste de la naturaleza y de las leyes implacables de la vida biológica del planeta. Como herramienta de supervivencia, la cultura protege al ser humano incluso contra su propia esencia biológica.

3. La religión brota de la capacidad lógica del ser humano que procura el confort existencial. La noción de causa y efecto capacita al ser humano para crear explicaciones que dan orden al mundo y ayudan a aceptar la muerte propia y la pérdida de otros seres. Religión y ciencia, por tanto, están unidos en este punto: el origen de ambos es la capacidad de razonamiento del ser humano, la lógica. En el caso de la religión, la lógica está subordinada a la imperiosa necesidad de vital de "entender" y aceptar el horror que es la existencia ante la muerte de uno mismo y de todos los demás, y ante el sentimiento de abandono frente a la dureza caprichosa del medio natural. La ciencia, aunque se basa en la observación y el principio de causa en efecto, no nace de la misma necesidad existencial.

4. La ciencia ha venido a sustituir para muchos la función de la religión. La ciencia en tanto relato que explique el funcionamiento de la naturaleza, sirve como una suerte de narrativa fundacional y existencial que cumple idéntica función que la religión: proporcionar la convicción vital de que hay orden en el mundo, aunque se abstiene de explicar el por qué ni para qué fin.

5. La racionalidad no es pues patrimonio de la ciencia sino que es la fundación original de la fe entendida como respuesta ante la angustia humana de estar vivo. La racionalidad está en la raíz del mayor grado de sufrimiento que experimentan los seres humanos en comparación con otros seres vivos, y es la base de la respuesta humana ante ese mismo dolor.
6. Todo organismo busca el confort ante las necesidades que surgen en cada instante de la existencia. El orden de las necesidades humanas incluye las inferiores comunes a todo ser vivo, pero incluye también otras procedentes de la mayor capacidad cognitiva del ser humano. No es solo pues la racionalidad lo que caracteriza al ser humano frente a las demás especies sino la mayor grado de sufrimiento que padece debido a esa racionalidad.